Parenti reconstruye el contexto social y político del asesinato de César, ofreciendo detalles fascinantes sobre la sociedad romana. En estas páginas encontramos elecciones dirigidas por dinero, la lucha por la democracia económica, el uso de la religión como instrumento del control social, el abuso sexual de esclavos y el uso político de ataques homófobos. Aquí se narra una historia del imperio y de la corrupción, de patriarcas y de mujeres subordinadas, de capitalistas que se enriquecen, de provincias doblegadas, de escuadrillas de la muerte y de caza de brujas políticas.
Michael Parenti está considerado uno de los pensadores estadounidenses más progresistas de los últimos tiempos. Recibió su doctorado en ciencias políticas en la Yale University en 1962 y ha sido profesor en numerosos institutos y universidades. Sus escritos han sido muy difundidos en diarios y revistas –CovertAction Quarterly, Z Magazine, New Political Science, Monthly Review, The Humanist, Dollars and Sense, The Nation, Los Angeles Times, New York Times– y ha participado en programas de radio, aportando en todas sus intervenciones interesantes ideas sobre temas como: “Democracia y poder económico”, “Imperialismo y Estados Unidos”, “Intervencionismo de los EE.UU.”, “Terrorismo y Globalización”, “los Media”, “Ideología e Historia”, “Raza, género y clase”, “El derrocamiento del comunismo”, etc. Algunos de sus libros más renombrados son: La trampa del terrorismo, Democracia para unos pocos, Matar a una nación, Contra el Imperio, Inventar la realidad, Tierra de ídolos, La espada y el dólar, El asesinato de Julio César y La Historia como misterio (publicados en esta misma colección).
La mayoría de los historiadores, antiguos y modernos, han visto la última república de Roma a través de los ojos de su nobleza rica. Miran a los plebeyos romanos como una multitud parásita, interesada solamente en panes y circos. Hablan de César, que levantó la causa popular, como un déspota y un demagogo, tratando su asesinato como el resultado de una pelea personal o de una lucha constitucional, pero desprovisto de contenido social. En El asesinato de Julio César, Michael Parenti hace un análisis crítico de estas aserciones de los “caballeros historiadores” y nos presenta una historia compilatoria de la resistencia popular contra el poder atrincherado. Parenti demuestra que César tan sólo fue el último en una línea de reformadores que a lo largo de todo un siglo serían asesinados por los opulentos conservadores.
El asesinato de César desemboca en una guerra civil prolongada, el fallecimiento de una república de 500 años y la aparición de una regla absolutista que prevalecería en Europa occidental durante siglos.
Nº de páginas: 256
PVP: 16 ¬
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Comentarios sobre la obra
José Mª Carrere
“Hasta hoy día, la historia de la humanidad ha sido la historia de la lucha entre clases”. Así empiezan Engels y Marx el primer capítulo del manifiesto comunista. Es una manera de mirar la historia; dado que la observación condiciona el entendimiento y estudio de la misma. Aunque ante la fantasía e imaginación se suelen anteponer la exactitud y objetividad de la ciencia, en las jornadas sobre Einstein recientemente organizadas en Donosita, en cambio, ha sido la imaginación del físico alemán el don mas remarcado, no como modo de creación de mundos fantásticos, sino para dar rienda suelta a “serias” investigaciones científicas, como la teoría de la relatividad.
Y como la historia es una ciencia, parece que debe ser campo de investigaciones exactas. Pero, en cambio, todos sabemos que una de las peculiaridades mas remarcadas de la historia es su propia interpretación. Pongamos como ejemplo la conquista o descubrimiento de América. Elegir entre las dos palabras no cambiará el echo de la llegada al Caribe, el 12 de Octubre de 1492, de la expedición amadrinada por la corona de España; pero elegir una u otra palabra producirá una actitud totalmente diferente ante las consecuencias de tal llegada. Y así quedará en los libros de historia. Lo que pasa es que la mano encargada de difundir la versión de dicho acontecimiento será la que condicione la interpretación de la historia. En la escuela aprendimos que la versión de la conquista de América no tendría después nada que ver con la revisión hecha por Bartolomé de las Casas. Pues contar la historia, mostrará una opinión sobre el devenir de la humanidad. Pero sobre cómo y quién cuenta la historia, nosotros los vascos ya tenemos algo que decir. Los vascos y los trabajadores. Bertolt Brecht escribió un poema que luego nos cantaría Mikel Laboa: “Las preguntas que un trabajador está leyendo”. El escritor alemán coloca al trabajador delante de la historia, y por los acontecimientos más importantes de aquella época, advierte que sólo aparecen reyes y héroes. “A tanta historia, tanta pregunta”, así termina el poema. Así pues, ponerse enfrente de la historia es hacer preguntas y, a poder ser, fuera del sitio que ocupamos en nuestra vida, si queremos comportarnos honestamente con nosotros mismos.
Michael Parenti se esfuerza en hacer ese ejercicio, para detrás de la historia contar su punta de vista. En sus libros, hace una revisión de la historia, trayendo al lector lo que no se cuenta en la historia oficial. No caerá, en cambio, en un maniqueísmo barato, y estimulará la reflexión. Nos viene de la mano de la editorial Hiru su último libro: El asesinato de Julio César. En el coge como referencia la gente romana y los conflictos políticos de la última república, relatándonos aquellos acontecimientos desde otro punto de vista. En un estilo ligero nos enseñará la lucha entre clases de la gente de roma, poniendo patas arriba el espejismo de la idea de la “democracia”. En este libro, como en los anteriores, Parenti escribe también para los que no son aficionados a la historia, y haciendo una analogía, es valido para que entendamos los actuales tiempos. Porque la ambición de los ricos, la erótica del poder y las relaciones entre clases no han cambiado mucho desde entonces.